Los rumores sobre cambios de Lamar Jackson se arremolinan mientras el futuro del QB de los Ravens se pone en duda

Cuando está lo suficientemente sano para jugar, su rendimiento ha sido inconsistente. Completó el 63,7 por ciento de sus pases esta temporada para 2,311 yardas, con 18 touchdowns y seis intercepciones, registrando un índice de pasador de 101,4.

Los aspectos más destacados fueron impresionantes, incluidas demostraciones de cuatro touchdowns contra Cleveland y Detroit, pero también hubo períodos inconsistentes, incluidos juegos con múltiples pérdidas de balón contra rivales divisionales.

Un informe de esta semana de ‘The Athletic’ citó a un destacado agente pronosticando que Jackson podría convertirse en “la historia más importante de la temporada baja”, indicando que al menos se está planteando una posibilidad de intercambio en los círculos de la liga. Un ejecutivo anónimo de la NFL también expresó su preocupación por la decisión de Jackson de renunciar a la representación tradicional, señalando que la ausencia de un intermediario ha dificultado la comunicación durante las discusiones sobre lesiones y negociaciones contractuales.

Mientras tanto, informes separados han destacado las crecientes tensiones dentro de la organización, con sugerencias de que el entrenador en jefe John Harbaugh se ha sentido cada vez más frustrado por los desafíos actuales que rodean la situación.

Algunos relatos han ido incluso más allá, planteando dudas sobre las rutinas de preparación de Jackson, incluido un informe del ‘Baltimore Sun’ que afirmaba que ocasionalmente se había quedado dormido durante las reuniones del equipo. Sin embargo, pocos en la liga cuestionan que, si Jackson estuviera disponible, el interés sería sustancial. A los 28 años, con un pedigrí de Jugador Más Valioso y un desempeño de nivel de élite cuando está en forma, inmediatamente dominaría el mercado de mariscales de campo.

El acuerdo de Jackson, que se extiende hasta 2027, incluye una de las cifras salariales más elevadas en la posición la próxima temporada, y cualquier posible intercambio exigiría un retorno sustancial, con múltiples selecciones de primera ronda vistas como una base realista.

Miami ha surgido en discusiones especulativas, dada la incertidumbre del mariscal de campo de los Dolphins y las conexiones de Jackson en el sur de Florida, aunque no se ha confirmado ningún interés oficial.

Por el momento, la atención de Baltimore permanece en el domingo por la noche y en si Jackson estará lo suficientemente en forma para salir al campo. Harbaugh informó a los periodistas que su estado aún está “por determinar”, y señaló que si Jackson obtiene la autorización médica, será titular.