Milán estaba buscando respuestas, pero el debut de Santiago Giménez solo planteó más preguntas. La ausencia de Leao debería haber abierto la puerta para el nuevo número 9 en rojo y negro, pero en cambio, la actuación del mexicano fue decepcionante.
Pocas bolas se tocaron, muchos errores y cero química con sus compañeros de equipo. Su condición física está lejos de ser óptima, y el peso del ataque permaneció sin cubrir. Entonces, la gerencia se pregunta: Allegri necesita un verdadero delantero, una fuente garantizada de objetivos.
Boniface está a la vista, pero las dudas sobre su rodilla son preocupantes. Mientras tanto, las pistas para Hojlund, Hard más y Embolo permanecen vivos. El mensaje es claro: Milán no puede permitirse el lujo de quedarse sin un número 9.
⛔ Giménez, una oportunidad desperdiciada
“Bebote” no aprovechó su oportunidad: sus estadísticas son condenatorias, con 8 bolas perdidas, incluida la que condujo al gol de Bonazzoli, y un gol no permitido por fuera de juego.
El equipo trata de servirle, pero pierde los controles y el tiempo. Más que un delantero central, parece un cuerpo extraño.
Y pensar que llegó en enero lleno de entusiasmo y con el toque de un delantero de los Países Bajos …
⚠️ Bonifacio, el riesgo que retiene a Milán
El talento está ahí: físico, objetivos, presencia en la caja. Pero su rodilla derecha sigue siendo una bomba de tiempo.
Cuatro consultas médicas no han eliminado las dudas: el Milán teme más contratiempos y está evaluando cuidadosamente. Una posible llegada a un préstamo seco, sin obligaciones, para reducir los riesgos.
👀 Plan B: los otros nombres en la lista
Si Boniface no convence, Milán ya tiene alternativas listas. Hojlund podría volver a la moda con una fórmula de préstamo a compra.
Conrad Harder, de 20 años, es un perfil para desarrollarse pero inexperto. Breel Embolo ofrece experiencia y bajos costos, mientras que Tolu Arokodare ha resurgido desde Bélgica.
No hay escasez de opciones, pero se necesita una aceleración.
Allegri, sin un 9️⃣ No puedes ir lejos
El KO contra Cremonese confirmó los miedos: Milán no puede soportar una temporada sin un verdadero delantero.
Allegri lo sabe, y también los directores. Giménez no es suficiente, Boniface es un signo de interrogación, y los otros nombres todavía están en juego.
La sensación es clara: al final de la ventana de transferencia, debe llegar un número 9 capaz de marcar la diferencia.
Este artículo fue traducido al inglés por inteligencia artificial. Puede leer la versión original en 🇮🇹 aquí.
📸 Marco Luzzani – 2025 AC Milan