El partido entre Batel Guarapuava y Nacional de Campo Mourão este sábado (4), válido para la Copa Federação Paranaense de Futebol, fue marcado por un presunto insulto racista seguido de un asalto.
El incidente en cuestión ocurrió después de que se convocó una falta de ataque contra el equipo visitante. El capitán de Nacional, PV, fue a hablar con el árbitro y, poco después, escuchó insultos de dos oponentes de Batel.
Según los informes, el pronunciado por Diego era “mono”, que inmediatamente enfureció a PV.
Golpeó a Diego, quien cayó al suelo y luego recibió atención médica.
PV terminó siendo expulsado, pero el protocolo antirracismo se activó, con el árbitro Diego Ruan Pacondes da Silva cruzando los brazos en una “X”, un gesto que simboliza la interrupción del partido debido a tal situación.
El número 8 de Batel tuvo que abandonar el estadio en una ambulancia, lo que provocó que el juego se detuviera durante 18 minutos hasta que otro vehículo llegó al estadio.
El Federação Paranaense de Futebol emitió una declaración condenando la Ley Discriminatoria, y también declaró que las imágenes se enviarían al Tribunal de Justicia Deportiva local.
Nacional también habló, apoyando a su jugador.
Batel ganó 1-0, logrando su primera victoria.
Alcanzaron cuatro puntos después de cuatro partidos, dejando Nacional con cero después de su tercer juego.
El líder es Cianorte, con siete puntos. FC Cascavel (seis) y el equipo Sub-23 de Athletico (cinco), todos con tres partidos, completan el grupo.
El Grupo B está compuesto por Azuriz, Rio Branco, Patriotas, Coritiba y Foz do Iguaçu.
El campeón de la Copa FPF se clasificará para la Copa Do Brasil 2026. Si ya tienen un lugar a través de la Paranaense 2025, el subcampeón ganará el derecho.