¡Lo impensable sucede en la final de la Copa FA! Con un gol en la primera mitad y un incidente muy dudoso que involucra a Dean Henderson, Crystal Palace gana 1-0 contra el Manchester City y celebra el primer trofeo en su historia.
Una temporada dramática para el equipo de Pep Guardiola, que termina en una crisis que parece interminable y ve que el último trofeo posible se desvanece de una manera grotesca y surrealista.
El objetivo que desbloquea el juego es que en el 16 ‘por Eberechi Eze. El mediocampista atacante de veintiséis años es letal en explotar la cruz baja desde la derecha por Muñoz, desbloqueando el juego. Para el jugador inglés, este es su quinto anotación consecutiva del juego.
Desde el momento del liderazgo en adelante, para bien o para mal, el protagonista absoluto es el portero Dean Henderson.
El portero interviene con un golpe fuera del área, quitando la pelota de la disponibilidad de Erling Haaland. El VAR verifica el incidente, pero no indica al árbitro que extraiga la tarjeta roja.
A partir de ese momento, Henderson será el MVP.
Primero, la penalización salvada de Marmoush en el 36 ‘, con una inmersión felina a su derecha. Esta es la primera penalización interceptada en una final de la Copa FA desde la de Cech en 2010.
Unos minutos más tarde, otro milagro, una inmersión de “estilo Sommer” para eliminar el disparo rizado de Doku del espejo y enviar a los equipos al intervalo a 0-0.
En la segunda mitad, sucede muy poco, con solo una oportunidad seria para Echeverri, quien es detenido por el habitual Henderson. Crystal Palace celebra, pero Pep Guardiola está furioso.
El entrenador se enfrentó con Henderson, culpándolo por la tarjeta roja faltante que ciertamente habría cambiado el impulso del juego.
Las tensiones son altas, como es inevitable después de la peor temporada de su carrera.
📸 Shaun Botterill – 2025 Getty Images