Según Diario, como el entrenador en jefe de Atleti, Diego Simeone, dio sus pensamientos sobre los procedimientos en Anfield.
“El equipo no comenzó bien, no tuvimos esa suerte en el 1-0, lo que nos sacó de lo que habíamos planeado. Luego llegó el segundo, que era un gran objetivo. Pero el equipo, con espíritu, con trabajo, con calidad, comenzó a igualar el juego, para generar juego, para demostrar que estábamos dentro. Terminamos la primera mitad con el 2-1 de Llorente, que era alentador.
“En la segunda mitad también elevamos nuestro nivel, con más tranquilidad. Sufrimos algunos contraataques porque son muy buenos, pero nos quedamos al límite. El 2-2 apareció y luego un gran gol de Van Dijk, impresionante. Nos deja con el sabor amargo de la derrota, pero también el espíritu que tienes que jugar para el Atlético”.
Imagen a través de Clive Mason/Getty Images
Simeone fue expulsado después del difunto ganador del Liverpool después de reaccionar a los fanáticos detrás de su área de refugio: elaboró lo que sucedió al hablar con los medios de comunicación.
“Estamos en un lugar donde no tenemos derecho a reaccionar. No es correcto cuando reaccionamos porque somos protagonistas, pero de la misma manera que luchamos contra el racismo y los insultos para los jugadores, los bancos se veían juntos y no es fácil recibir insultos en todos los juegos. El tercer objetivo llegó y además de los insultos, y yo solo soy una persona.
“Siempre hablamos de preocuparnos, respetar … pero te insultan a lo largo del juego desde atrás. No puedo decir nada porque soy el entrenador. Mi reacción no es justificable, sino que después de 90 minutos de insultos, no es fácil. El árbitro me dijo que entendió la situación. Con suerte, Liverpool puede mejorar esa parte, y cuando identifican a la persona que sí, dejó que las consecuencias.
“No voy a entrar en detalles sobre por qué fueron los insultos. Desde el lado que tengo tengo que mantener el lugar, apoyar todo lo que sucede detrás del banco de los sustitutos y hasta que la sociedad pueda resolverlo. Cualquier entrenador tiene que vivir con eso porque sucede todo el tiempo”.