El presidente ejecutivo de Tottenham, Daniel Levy, renunció a su papel después de 24 años al frente del club.
Levy fue nombrado en marzo de 2001 y se va después de que los Spurs ganaron la Europa League la temporada pasada para finalizar una espera de 17 años para un trofeo.
“Estoy increíblemente orgulloso del trabajo que he hecho junto con el equipo ejecutivo y todos nuestros empleados”, dijo Levy.
“Hemos convertido este club en un peso pesado global que compite al más alto nivel. Más que eso, hemos construido una comunidad.
“Tuve la suerte de trabajar con algunas de las mejores personas en este deporte, desde el equipo de Lilywhite House y Hotspur hasta todos los jugadores y gerentes a lo largo de los años.
“Deseo agradecer a todos los fanáticos que me han apoyado a lo largo de los años. No siempre ha sido un viaje fácil, pero se han hecho un progreso significativo. Continuaré apoyando a este club apasionadamente”.
Tottenham dijo que Peter Charrington se convertiría en presidente no ejecutivo del club, un nuevo papel.
Charrington, director de los propietarios de Tottenham, Enic, fue nombrado miembro de la Junta de los Spurs en marzo como director no ejecutivo.
Tottenham pudo haber ganado su trofeo europeo la temporada pasada, pero el éxito llegó en medio del telón de fondo de una difícil campaña de la Premier League en la que el equipo terminó 17º bajo Ange Postecoglou, quien fue despedido en el verano y reemplazado por Thomas Frank.
Hubo una serie de protestas dirigidas a Levy la temporada pasada, con destacados pancartas en la derrota en casa de Leicester en enero llevando los mensajes “Nuestro juego es sobre gloria, el juego de Levy es sobre la codicia” y “24 años, 16 gerentes, 1 trofeo – tiempo para el cambio”.
También hubo cantos regulares de “Levy Out” durante la campaña.
Levy supervisó el cambio de White Hart Lane al estadio Tottenham Hotspur de última generación, que el club hizo su nuevo hogar en 2019.
El experto en finanzas de fútbol Kieran Maguire ha descrito a Tottenham como el “club más rentable en la historia de la Premier League” debido al dinero que genera su nuevo estadio, una estructura salarial históricamente más baja y un “grado de precaución” en el gasto de transferencia.