Radhika Yadav tenía la esperanza de una larga y exitosa carrera en el tenis, pero fue asesinado por su padre en su India natal a principios de esta semana.
La estrella del tenis indio Radhika Yadav ha sido asesinado a tiros por su padre, Deepak Yadav, en Gurugram. La policía local fue informada por un hospital privado en el área de que Yadav había fallecido después de ser encontrado con heridas de bala.
Cuando la policía llegó al hospital, el competidor indio fue acompañado por su tío Kuldeep, y sus padres no asistieron. Un informe policial en la estación de policía del Sector 56 de Gurugram vio un cargo de asesinato presentado contra Deepak.
Se entiende que el padre de Yadav se había quedado enojado con la decisión de su hija de continuar dirigiendo una academia de tenis en el área.
“Él (Deepak) había estado molesto por un tiempo, ya que los lugareños lo estaban burlando de los ingresos de su hija”, dijo el oficial de la casa de la estación, el inspector Vinod Kumar, al Indian Express.
“Estaba preocupado por sus comentarios: seguirían diciendo que la casa está corriendo con su dinero, y él es demasiado dependiente de eso. Le había pedido (Radhika) varias veces antes que dejara de trabajar en la academia, pero ella se negó. No pudo soportarlo más”.
NDTV informó que Deepak admitió su crimen a la policía. Se afirmó que el padre admitió haber disparado a su hija tres veces desde atrás porque ella se negó a cerrar su academia al que le dijeran que lo hiciera.
Radhika había forjado una carrera para sí misma como tenista profesional, tocando tanto singles y dobles en el circuito de ITF. Ella había jugado 36 partidos individuales y siete dobles en la gira durante su carrera.
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La última llegó en marzo de 2024, antes de que, según los informes, recurriera al entrenamiento en lugar de una carrera como jugador. A raíz de su fallecimiento, una amiga de Yadav acudió a Instagram para rendir homenaje.
“Radhika era mi mejor amiga”, decía la declaración de Himaanshika Singh Rajput. “Hace solo dos días, me paré en su cremación, tratando de procesar lo inimaginable, que ya no estaba aquí, que su vida le fue quitada de la manera más brutal y desgarradora”.