Rafael Nadal, Serena Williams y Roger Federer pidieron conducta abierta italiana

El ex semifinalista de Grand Slam, Sam Querrey, llamó a Rafael Nadal, Serena Williams y Roger Federer por acaparar los tribunales de práctica en el Abierto de Italia. Los organizadores en Roma han ampliado la infraestructura del torneo en los últimos años, pero los jugadores solían tener que desechar y arañar las ranuras de práctica en horario estelar que, según Querrey, a menudo iban a los grandes bateadores.

En Nadal, Williams y Federer, no son mucho más grandes. Los tres ahora se han retirado, con 65 títulos combinados de Grand Slam entre ellos. Y el ex número 11 del mundo que Querrey seguía siendo un competidor de la gira ATP de alto nivel cuando el trío estaba en la cima de sus poderes.

Recordando su experiencia pasada en el Abierto de Italia ‘Hace siete u ocho años’, Querrey le dijo al podcast Nothing Major: “Era imposible practicar allí.

“En primer lugar, es solo una cancha, literalmente una cancha de práctica para 150 jugadores y Serena lo tendría durante dos horas, y luego como Rafa durante dos horas, Federer la tomaría durante unos noventa minutos, y todos los demás están en Pietrangeli”.

El jugador de 37 años continuó: “Tenían una cancha de práctica para hombres y mujeres, y Rafa lo tendría durante dos horas seguidas. Lo cual estaba bien, ya sabes, como los dos a cuatro pm, solo Rafa, ya sabes, mientras que todos los demás están como fuera, golpeando a 20 minutos de distancia, cuatro (jugadores) una corte, y era brutal”.

Con el tiempo de práctica adicional de la cancha fue un gran éxito para el especialista de arcilla Nadal, quien ganó el Abierto de Italia 10 veces durante su carrera, más que cualquier otro jugador. Roma también fue un feliz campo de caza para Williams cuando recolectó el cuarto de sus cuatro títulos allí en 2016.

Pero no se puede decir lo mismo de Federer. Clay era la superficie más débil del bateador suizo, con solo uno de sus triunfos de Grand Slam en el Abierto de Francia. Y el Abierto de Italia fue uno de los dos únicos eventos de Masters 1000 que lo eludieron, junto con los Masters de Monte-Carlo, que también se juega en arcilla.