Cuando los Chargers de Kansas City y Los Angeles se enfrentaron en Sao Paulo el viernes, el comisionado de la NFL Roger Goodell dejó en claro las intenciones de la liga en Brasil.
Durante el segundo juego de la temporada regular del país, Goodell, en medio de los intentos de Donald Trump de presionar a los comandantes de Washington para que hiciera un cambio de nombre, habló sobre la visión a largo plazo de la liga e incluso sugirió que más ciudades podrían unirse a la lista.
“Volveremos”, declaró Goodell. “Creemos que este es un gran mercado con mucho potencial. Ha habido mucha discusión sobre Río”.
El juego estaba lleno de drama, ya que Travis Kelce golpeó a su propio compañero de equipo antes de recibir una dura bofetada en la cara.
Goodell fue más allá, y agregó: “Estaremos aquí (Sao Paulo) a largo plazo. Pero Río obviamente es un lugar en el que también tenemos cierto interés en jugar en algún momento. Nunca vamos a salir de Brasil. Esto es algo en lo que vamos a seguir jugando”.
El juego en sí sirvió como otro testimonio de por qué Brasil se ha convertido rápidamente en un mercado crucial para la NFL. Más de 47,000 fanáticos llenaron el Neo Quimica Arena, creando una atmósfera animada que combina el fútbol americano con entusiasmo brasileño.
Esto marcó el segundo juego de temporada regular de la liga en Sudamérica, luego del enfrentamiento del año pasado entre los Eagles y los Packers. La NFL ve claramente esto como más que un experimento: es el comienzo de algo más grande.
El optimismo de Goodell se alinea con los esfuerzos de expansión internacional más amplios de la liga. Durante una aparición en ‘NFL Gameday Kickoff’, comentó: “Esperamos regresar a Brasil. Ciertamente volveremos en el Reino Unido, y también estamos viendo el potencial de otro juego en el área del Reino Unido en Irlanda, posiblemente”.
Brasil no es el único destino que captura la atención de la liga. Alemania, que comenzó a alojar en Munich antes de expandir las operaciones a Frankfurt, se hace referencia con frecuencia como una plantilla para el crecimiento metódico en los mercados emergentes.
Goodell ha indicado que Río de Janeiro podría adoptar ese enfoque idéntico, proporcionando a Brasil múltiples lugares de anfitriones en las próximas temporadas. La expansión mundial ya está ganando un impulso significativo. Esta campaña incluye siete concursos internacionales sin precedentes en lugares como Berlín, Dublín y Madrid, que representa un esfuerzo calculado para establecer la NFL como una propiedad global de entretenimiento.
La organización también ha comprometido recursos para mejorar la infraestructura en el extranjero. Después de las quejas de los jugadores en 2024 con respecto a las condiciones de campo en Sao Paulo, la NFL asignó fondos sustanciales para renovar la arena de Neo Química antes del regreso de este año.
Ese compromiso financiero se interpretó ampliamente como evidencia de que la liga se dedica a establecer Brasil como un elemento permanente. Al examinar el futuro lejano, Goodell ha propuesto modificaciones aún más ambiciosas. Estos incluyen: extender la temporada a 18 concursos, con potencialmente 16 que tienen lugar más allá de las fronteras estadounidenses.
Si ese concepto gana impulso, Brasil y posiblemente Río, podría transformarse en un componente de calendario de rutina en lugar de un escaparate ocasional. El mensaje del Comisionado era inequívoco: Brasil no es simplemente un destino, es parte integral del futuro de la NFL.