Maratonista afectado declara haber sido desplazado del primer puesto por incidente canino

Atletismo

En el transcurso de una maratón en Argentina, un incidente peculiar sacudió el mundo del atletismo cuando un perro irrumpió en la pista y alteró el curso de la carrera. El afectado, Robert Kimutai Ngeno, corredor originario de Kenia, vio frustradas sus esperanzas de ganar al ser atacado por el canino a pocos kilómetros de la meta.

Ngeno expresó su experiencia días después, revelando que el episodio le generó un gran temor y afectó su concentración. “Estaba realmente asustado, y creo que eso fue lo que me hizo perder la concentración”, comentó al medio Nation. Añadió que, a pesar de liderar la carrera, la brecha se cerró en los últimos kilómetros, y su objetivo de registrar un tiempo destacado se vio truncado por el perro. Si bien intentó alejar al animal con piedras, este persistió en perseguirlo hasta que una mujer logró detenerlo.

El incidente tuvo lugar entre los kilómetros 25 y 38, justo cuando Ngeno estaba al frente de la competición. El ataque del perro callejero lo relegó al tercer puesto en el podio, a pesar de su esfuerzo por mantenerse en la carrera mientras el can lo perseguía ladrando. Este cambio de posición representó una pérdida económica significativa, ya que de haber ganado, habría obtenido alrededor de 7.400 dólares, una cifra considerablemente mayor que la que recibió al quedar en tercer lugar.

A pesar del contratiempo, Ngeno logró mantener un buen ritmo y cruzar la meta en 2 horas y 10 minutos, superando a su compatriota Cornelius Kiplagat. Sin embargo, no ocultó su descontento, expresándose en redes sociales y criticando a las autoridades deportivas. El senador del distrito de Nandi en Kenia, Samson Cherarkey, denunció la falta de respuesta de las autoridades kenianas ante el incidente y lamentó la pérdida de dignidad del maratonista.

La maratón, que contó con la participación de 12 mil corredores en su 38ª edición, se llevó a cabo en la Ciudad de Buenos Aires. La ruta incluyó lugares emblemáticos como la avenida Figueroa Alcorta y Dorrego, el estadio de Boca Juniors, el Obelisco, la Avenida Corrientes, la Plaza de Mayo, la Casa Rosada, la Catedral de Buenos Aires y el Cabildo. A pesar del inusual suceso, el evento deportivo continuó su desarrollo, marcando una jornada singular en la historia de las maratones en Argentina.